Durante este mes voy a tratar de hacer algunos comentarios
previos antes de los partidos más importantes de la Copa. Entiendo que es fácil,
como se dice por ahí, hacer comentarios con el diario del lunes, explicar
porqué las cosas pasaron como pasaron. Acá
vamos a tratar de analizar el partido previamente, imaginar posibles escenarios
a partir de analizar los recursos y las estrategias de los equipos y arriesgar
algún posible resultado, convencidos que el futbol tiene tanto de arte como de
ciencia y que, contrariamente a lo que decía Dante Panzeri, cuenta con una dinámica
que sí se puede pensar a priori.
Brasil llega con un equipo extraño, diferente a lo que manda
su historia y con una presión desbordante sobre sus jugadores, solo comparable
a la que hay sobre los argentinos. La frase “Brasil tiene la mejor defensa del
campeonato” probablemente no haya sido dicha nunca seriamente en ningún torneo
de la historia hasta hoy. La cantidad y la calidad de recursos que cuenta en
esa área le permitieron a Scolari alardear dejando afuera del mundial a jugadores
como Miranda y Filipe Luis del Atlético de Madrid, que serían titulares, para
no ir muy lejos, en Argentina. Dos centrales altos, fuertes y con manejo del
balón, David Luiz y Tiago Silva y dos laterales puramente brasileños, con mucho
recorrido y muy ofensivos, Marcelo y Dani Alves. Pero estos dos van a atacar
menos de lo que uno esperaría y se van a sumar a la presión en la mitad de la
cancha, la nueva moda del futbol mundial. Allí, jugadores como Paulinho y Luiz
Gustavo intentaran cumplir el rol que Gilberto Silva cumplía en el equipo
campeón del 2002. Lo que en el Brasil del mundial de Corea-Japón hacía 1
jugador, presionar y morder para recuperar la pelota en este equipo lo harán 7
jugadores. Gilberto Silva era denominado entonces “el menos brasileño de todos
los brasileños” y hoy se busca un equipo con Neymar y diez Gilberto Silva, todo
un símbolo. Oscar, del Chelsea, tiene que, cuando no este marcando y
presionando, proveer de futbol a una delantera que estará un poco saturada.
Neymar, Fred y Hulk. Neymar hasta ahora ha demostrado ser más jugador en la publicidades
que en el campo de juego, “el más brasileño de los brasileños”, necesita
espacio y tiempo para que aparezca su talento, si lo presionan y lo pelean lo
sacan del partido, no se desconecta de la realidad como Messi pero empieza a
tirarse al piso y a protestar. Fred,
del Fluminense, es un misterio solo
conocido dentro del futbol brasileño, él y el aún más ignoto Jo fueron las apuestas
de Scolari para ningunear al mucho mejor Diego Costa. Cuando este decidió jugar
para España Scolari aseguró que sí lo hubiera convocado pero la realidad es que
su enamoramiento con este par, Fred y Jo, viene
de hace mucho y Diego Costa hubiese mirado el mundial desde su casa en
Lagarto, en el Nordeste brasileño. Neymar y Hulk atacaran por los flancos, lo
que vuelve innecesarios a Marcelo y Dani Silva en lo que mejor saben hacer, o
se volcaran al medio dejándole la banda a los laterales y colapsaran en el área
esperando un centro, Algo para lo que no hace falta la tremenda potencia de Hulk,
brillante en largas embestidas desde el mediocampo pero normal en el área, o la capacidad de desborde de Neymar. Algo
sobra en ese dibujo. Scolarí imagina que se combinaran en los flancos haciendo
2-1 a los laterales croatas pero en el Barcelona Neymar y Dani Silva tenían que
hacer precisamente eso y no lo hicieron casi nunca, con Dani Silva revoleando
centros todo el tiempo que pasaban por arriba de la cabeza de Neymar. Ademas es
ingenuo pensar que el astuto Nico Kovac no tiene ensayado un sistema de ayudas para
no dejar solos a sus laterales. Fred esperará en el punto de penal a que le
quede alguna picando.
Croacia es un rival mucho más serio de lo que muchos
esperan.
Aca se lo vé con el típico desdén que tenemos hacia aquellos países pequeños
que no tienen una gran liga televisada. Se pasa por alto muy fácil que hoy jugaran con
la cuadriculada albirroja Luka Modric, cerebro del Real Madrid campeón de la Champions
e Ivan Rakitic, cerebro del Sevilla campeón de la Europa League. Un poquito de
futbol tienen estos dos. Por su talento podrían tranquilamente ser brasileños,
Modricao y Raquitinho, pero por suerte son croatas porque Scolari no los
hubiera convocado, mucho futbol y poca marca para el nuevo GymBrazil. Atrás estará Dejan Lovren del Southampton, alto, fuerte
y seguro, con futuro en un grande de la Premier. El arquero Pletikosa es un
veterano de muchas batallas que nunca saldrá en el video de las diez mejores
atajadas pero tampoco en el video de los bloopers. Mario Mandzukic, goleador de
la Bundesliga, arrastra una suspensión de las eliminatorias y no jugara, en su
lugar estará el brasileño nacionalizado Eduardo que ha ido recuperando de a poco
su nivel después de la gravísima lesión que casi acaba con su carrera.
Sorprende para bien, la presencia de Ivica Olic, uno de esos talentos notables
de Europa del este, capaz de gambetear a 5 cinco jugadores, llegar abajo del
arco y tirarla afuera. Olic y Perisic, compañeros en el Wolfsburgo, van a intentar aprovechar las espaldas de Marcelo
y Dani Alves cuando pasen al ataque, si es que pasan, lo que no es seguro.
Brasil desatará una tormenta de presión sobre el mediocampo e
intentará abrumar físicamente a los croatas buscando un gol rápido que afloje
el nerviosismo de los jugadores y el público, habrá muchos centros y tiros de
media distancia. Croacia, a quien le sobra este partido y que tiene como misión
en este mundial ganarles a Mexico y Camerun y pasar a octavos, responderá con
futbol y toques, mucha concentración
para no cargarse de amarillas de cara a los partidos que sí les importan y
velocidad para explotar los espacios. A medida que el partido avance y Brasil
no marque, la cancha se va a empezar a inclinar en favor de los croatas, si
estos marcan primero, algo perfectamente posible, podemos asistir a un
verdadero drama.
La gran concentración de delanteros (habrá 6) augura que
habrá varios goles.
Pronostico: Brasil 2- Croacia 2
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